Texto Argumentativo de "El milagro secreto"

"La inevitabilidad de la muerte"

“El milagro secreto” es un relato que va más allá de las limitaciones temporales y religiosas, uniendo el mundo de los sueños con la realidad. Está historia se trata de Jaromir Hladík, un escritor judío que enfrenta su propia mortalidad.

Borges sitúa, el cuento durante la Segunda Guerra Mundial, en medio el genocidio judío; en el cual fue arrestado y no pudo levantar ninguno de los cargos de la Gestapo: su apellido materno era judío, su sangre era judía, y realizo estudios sobre obras judías.

El narrador desafía las percepciones del tiempo y espacio, jugando con la percepción del lector; desdibujando las fronteras entre la ficción y la realidad.

Hadík, estaba confinado en una celda condenado a muerte.

La noche anterior a su muerte, Hadik sueña con la obra que estaba escribiendo “los enemigos”, y revive los 3 actos ya escritos, al concluirlos pensó que aún le faltaban 2 actos y que muy pronto iba a morir. Siente que sus tratados sobre el tiempo y la eternidad no son lo suficientemente buenos, esta obra sería su posible redención.

Era tan grande su deseo de completar su obra maestra antes de morir, que lo impulsó a buscar un milagro que logre desafiar las leyes de la realidad. Habló con Dios y le pidió que le otorgue 1 año más para llevar a término ese drama.

Borges en la narración utiliza una cita del Corán en lugar de la Torá, sabiendo que el personaje es claramente judío, lo que sugiere que la búsqueda de lo divino va más allá de las fronteras religiosas. También hace uso del concepto del laberinto, que a simple vista parece tener como objetivo confundir a los que entran en él, pero se puede interpretar como las idas y vueltas, entradas y salidas que se presentan en la vida.

En el primer acto del drama “Los enemigos”, la obra centra la acción en la biblioteca del barón de Roemerstadt, quien recibe la visita de un hombre que lo llena de halagos. Luego, van llegando más personas, y el público comprende primero y luego el propio barón, que esos sujetos que lo halagan son en verdad sus enemigos y quieren perderlo. En los diálogos se menciona a la novia de Roemerstadt y a un tal Jaroslav Kubin, quien la importunó alguna vez con su amor y ahora, enloquecido, cree ser el barón de Roemerstadt. En el segundo acto, el barón debe matar a un conspirador. Al inicio del tercer acto las incoherencias crecen, aparecen en escena actores que ya no tenían participación en la trama, incluso el muerto. El tiempo se detiene y se comprende que en verdad Roemerstadt es Kubin, y el drama es su delirio. La obra finaliza con las primeras palabras del primer acto, y el lector comprende que el delirio circular de Kubin es interminable.

Llega el día del fusilamiento, el piquete ya está formado con el protagonista en el paredón y un sargento se dispone a ordenar el fuego, pero de repente el tiempo se "detiene" misteriosamente, ni Hladík ni otra criatura física puede moverse. El protagonista advierte que su deseo ha sido concedido y -en su mente- un año pasará entre la orden de fuego y la descarga. Se narra entonces cómo Hladík escribe mentalmente su drama, describiéndose los recursos literarios, las modificaciones de la trama, las correcciones finales, y los dilemas de cualquier autor. El protagonista "concluye" mentalmente "Los enemigos" dentro del plazo previsto, entonces el transcurso del tiempo se reinicia y Hladík muere fusilado el día y hora estipulada, perdiéndose para siempre la obra.

Cuando Hladik comprende que se le ha concedido el plazo, la contradicción se presenta en su objetivo final: justificar su vida y justificar a Dios, mediante la creación de una obra que solo va a existir en su mente y que desaparecerá en el momento en el que el tiempo vuelva a su curso.

A todas estas contradicciones que se dan en el ámbito de los sueños y de la creación literaria se contrapone la realidad: el destino de Hladík (y el de todos los hombres), es la muerte, que es irreversible.

Hladik es un verdadero escritor que no se vende a las ideologías, sino que crea por el hecho de hacer arte. Es un escritor egoísta que escribe lo que quiere y no lo que los demás esperan.

En conclusión, lo que nos muestra esta obra es la inevitabilidad de la muerte y lo frágil que es la existencia humana, como también lo fugacidad de la vida y nuestra ilusión de control que creemos tener sobre ella.